Este método mejora la absorción de grasas/aceites por parte del material, permitiendo que penetren más fácilmente en los gránulos de alimento. Si las grasas/aceites solo se adhieren a la superficie del gránulo, pueden filtrarse gradualmente en las bolsas de embalaje durante períodos de almacenamiento ligeramente más largos. Esto no solo compromete la apariencia de las bolsas, sino que también provoca la pérdida de nutrientes en el alimento.
En las etapas de post-procesamiento después de la extrusora, particularmente en la secadora, es casi imposible prevenir por completo el desprendimiento accidental de piezas del equipo, como pernos. En algunos casos, incluso las cuchillas rotas de la extrusora pueden mezclarse con el alimento terminado. Aunque normalmente se instala un tamiz clasificador después de la secadora, es posible que no elimine eficazmente estos contaminantes metálicos ocasionales, especialmente cuando se utilizan tamices de gran apertura para producir alimento de gran diámetro. Por lo tanto, la instalación de un tambor magnético permanente antes del depósito del producto terminado sigue siendo esencial para garantizar la seguridad y la calidad del producto.
La extrusora es el equipo básico en la producción de piensos extrudidos. Su estado operativo afecta directamente tanto a los procesos ascendentes como descendentes.Una estrecha coordinación entre la extrusora y los operadores de la sala de control es esencial para garantizar una producción sin problemas y reducir el consumo de energía..